En 1946, toda una ciudad fue subyugada por un asesino cuya identidad es un misterio hasta nuestros días; sus ataques eran tan brutales como efectivos sus escapes. Portaba una máscara de tela blanca, lo que le daba una apariencia espectral.Este es el caso de los asesinatos de Texarkana, y su violento perpetuador: El Asesino Fantasma.Support this podcast at — https://redcircle.com/la-luz-azul-podcast/donationsAdvertising Inquiries: https://redcircle.com/brandsPrivacy & Opt-Out: https://redcircle.com/privacy