Como dato curioso: Séneca, que llegó a ser uno de los hombres más ricos de su época, practicaba el ayuno y algunas veces dormía en la calle para no olvidar las adversidades por las que había pasado antes de llegar a donde estaba. Para recordarse que si había podido soportar eso, podía soportar cualquier cosa. Este concepto de la frase de hoy de Séneca, de la importancia de la adversidad para moldear nuestro carácter, está presente en muchos filósofos Estoicos como por ejemplo Musonio Rufo el cual defendía que “Quien trata de evitar todas las incomodidades tendrá más dificultades para estar cómodo que quien acepta incomodidades con periodicidad” Si aún no te has dado cuenta, nadie nunca ha llegado a posiciones de poder (ya sea por dinero o fama) sin haber pasado por adversidades. Todas las biografías de gente que ha dejado huella en el mundo están llenas de obstáculos. Por poner unos ejemplos muy conocidos: Beethoven era sordo Albert Einstein tenía déficit de ...